viernes, 18 de abril de 2008
Sigue la novela .... peloteros juergueros
No se si es de risa o para llorar, pero el caso de los jugadores juergueros es una muestra mas de la triste realidad moral del futbol; reflejo también de la realidad nacional, con honrosas excepciones por supuesto.
Primero la demora excesiva, timorata y cómplice de la comisión disciplinaria, o como se llame, en emitir un fallo, con dudas y postergaciones, para llegar al fin en una tenue e insegura sanción.
Evaluando el caso, es conocido que en el transcurso de los tiempos, quizas desde que se inventó el futbol, especialmente en nuestro medio, los futbolistas ya sea de equipos o selecciones se han dado sus escapadas o han llegado a los entrenamientos e incluso a los encuentros con signos evidentes de no haber gozado de un descanso reparador.
Es también conocido que en otras épocas era un honor incomparable el ser llamado a la selección y los Cubillas, Sotil y demás, en su plenitud y auge, priorizaban el jugar por la blanquiroja e incluso viajaban con su propio dinero.
Entonces el "pecado" de los actuales "metrosexuales" futboleros es el poco interés y dedicación a la responsabilidad de vestir la camiseta de la selección.
Unos se niegan a venir por no perder la oportunidad en sus clubes, otros vienen por turismo y relax, otros para visitar a sus familias, otros no quieren viajar si no se les paga anticipado y así por el estilo.
Lo peor es que la mayoría no vienen a darse íntegros, se van satisfechos como dijo el propio Pizarro "he cumplido con las indicaciones del técnico", en buen romance solo vienen a cumplir y no a dar y poner lo que deben como profesionales seleccionados. Se mueren de miedo de lesionarse.
Y lo mas triste e indignante, ni siquiera cumplen sino que hacen el ridículo como el funesto día del partido con Ecuador.
Ese es el meollo del asunto, la sanción debe ser medida en función de su poca entrega, su desastrosa actuación, su falta de vergüenza deportiva, su poca consideración con un pueblo que vibra y vive con el futbol, con su selección; un pueblo que se siente feliz cuando sus seleccionados se entregan, sudan la camiseta, los hinchas peruanos sabemos ver futbol y no pueden venir estos "jugadores" a burlarse y subestimar al aficionado dándole migajas, menos vistiendo la camiseta nacional, esa es la razón por la que quienes nos defraudaron deben ser separados de toda selección.
Para ello se necesitan directivos a los que no les tiemble la mano a la hora de tomar decisiones, que piensen en los intereses del futbol peruano antes que en los propios, que no se coludan para beneficios particulares, que no sean mezquinos con el deporte mas popular y emotivo.
En sus manos está volver a darle alegrías a los millones de peruanos que quieren ver y sentir nuevamente a su selección viva, con hombría y honor, dándose integra, es decir jugando al futbol como solo los peruanos de verdad lo saben hacer.
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario